Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de febrero 28, 2014

En días cómo hoy

No sé el tiempo que tendré que esperar para poder tenerte, ni me importa. Esperaré y daré por bueno cada minuto transcurrido sin ti. Ni cuántos peldaños tenga la escalera que me toque subir, para que nuestros caminos se crucen en el mismo punto. Los subiré. Sin duda y sin cansacio. Ni cuántas batallas he de librar para ganar la guerra de tu ausencia. Siempre fui guerrera. Que no te quepa duda que la ganaré. Ni cuántas noches he de traerte a mis sueños para hacerte real. Siempre me gustó soñar. Tampoco sé las veces que he de decirte que te amo, en cada poema que derrama mi tinta, ni a cuántas estrofas estoy de ti. No me preocupa. Soy poetisa. Ni cuántos días  he de imaginarte para traerte a mi mundo. Siempre poseí una gran imaginación. Valdrá la pena la espera y estas ganas que me matan. No habrá viento por fuerte que sea que me haga dar un paso atrás. Pero a pesar de todo esto, he de confesarte que hay días cómo hoy, que me duele quererte. Me duelen las horas sin ti. Mi vida sin ti.

Si muero

Te guardo entre las plumas de mi almohada, en cada rincón de mi alma, debajo de mis sábanas. Tu ausencia es arista de cristal que me hiere y que me corta. Te guardo en la piel y en mi cabeza. Me duele este amor que crece y crece imparable. Me duele cada paso que nos separa. Y me duele cada momento perdido sin ti. Guárdame en tu boca, en tus sueňos y en tus pensamientos y yo prometo guardarte en cada esquina de este loco corazón. Guárdame en tu pecho, entre tus palabras y entre tus silencios y juro que te haré dueňo de cada una de las partes de mi cuerpo. Desde mis pies hasta mi cabeza. Desde fuera hasta dentro. Y grito que te amo en un callado silencio. Y cada día me duele más esta espera que se hace eterna. Mi vida no es vida ya, si no te tengo. Y tu vida no es vida ya, si no me tienes. Y siento a veces que no puedo más. Y esto me va a matar. Seguro. Un favor. Si muero...tráeme rosas blancas que son las que me gustan.

Llévate

Llévate mis días ocres y mis noches de luna. Mi risa, mi voz y hasta mi garganta.Llévate todos y cada uno de nuestros momentos. Llévate las lágrimas rodadas y la soledad enmascarada detrás de mi sonrisa. Llévate todos mis sueňos. Los cumplidos y los que aún están por cumplirse. Y hasta el sitio dónde nos conocimos, si lo precisas. Llévate hasta el último recuerdo. Coge si lo deseas, mi vida entera. Arráncame la piel si quieres. Pero no te vayas...quédate.

La ladrona

En un descuido me lo ha robado. Ya merodeaba por aquí. Hace días que la veo. No tenía pinta de ladrona y me confié. Siempre fui mi confiado. Pero ha debido de usar guantes, porque no ha dejado la más mínima  huella. He buscado en todos los lugares posibles. He mirado en cada recoveco, en los escondites más insospechados. He mirado detrás de la luna, en el color rojo del amanecer. En las gotas de lluvia que perduran en el césped del parque. He buscado detrás de las olas caprichosas que besan la arena. También he mirado en la arena. No sea que esté enterrado y no lo divise. Le he preguntado al tendero de la esquina, al vendedor de periódicos, por si hubiese salido en primera página.También he buscado en la guantera del coche, debajo de las alfombrillas. En el cenicero inmaculado porque no fumo. Hasta he deshojado una margarita y he recitado, lo tienes, no lo tienes. Le he preguntado al poeta, que ha mirado entre sus letras sin éxito y me ha dicho que le pregunte al viento. Cómo si el v

Te escribo esta carta para decirte que te amo

Te escribo esta carta para decirte que no he dejado de amarte ni uno sólo de mis días. Que mi mayor fortuna, fue que nuestros caminos se uniesen en un mismo punto. Que nunca me venció el cansancio cuando tuve que subir cada peldaňo que me llevó a tu corazón. Ni me arrepiento de todas las batallas que me tocó librar para proclamarme vencedor de tu amor. Te escribo esta carta para decirte que aún guardo los poemas que tantas veces derrochó mi pluma en tu honor. Y todos los sonetos que me acercaron a ti. Recuerdo cada vocal, cada consonante que mi boca le susurra a tu oído, cuándo duermo junto a ti. Hasta las sábanas están llenas de versos, porque cuándo hacemos el amor, es pura poesía. Te amo por encima de todas las cosas. Más allá de las nubes. Del sol. En cada aurora, te amo. En mis recuerdos. Estás en cada estancia de mis pensamientos. Lo ocupas todo y te amo. Te amo en pasado, en presente y en futuro. Hay maletas enteras llenas de nuestras risas, de nuestros momentos, de nuestras p